Bomarzo es, sin duda, una de las lecturas más arriesgadas y atractivas que se le pueden plantear a un club de lectura, no sólo por la densidad de su narrativa, sino por la cantidad de temas y cuestiones que surgen.
Ser duque y nacer en pleno Renacimiento italiano deberían ser suficientes para alcanzar la felicidad en el siglo XVI. Sin embargo, el duque de Bomarzo deberá cargar con su joroba todos los días de su vida. No hay nada más trágico para un ser humano que ser consciente de su fealdad al contemplar los frescos de la Capilla Sixtina de Miguel Ángel.
Estamos ante una novela histórica con tintes fantásticos en la que Manuel Mújica Láinez construye un fresco del Renacimiento para plantear una dialéctica entre lo bello y lo siniestro: la inmortalidad, el poder, la corrupción, el amor o la superstición son algunas de las constantes de esta obra maestra de la Literatura Universal. El origen, un viaje del autor al parque de los monstruos, situado en la localidad italiana de Bomarzo, en la provincia de Viterbo.
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